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A cierta señora, en su jardín – Sterling Allen Brown

Sterling Brown fue un poeta negro muy influenciado por el blues, el jazz y por la mística y cultura afroamericana del este de los Estados Unidos. Comenzó así escribiendo poemas un poco encriptados en el lenguaje y las costumbres de las comunidades negras. Después de la secundaria estudió en el Williams College y más tarde obtuvo una maestría por la Universidad Harvard. Con lo cual —también influenciado por poetas como T. S. Eliot, Amy Lowell, Edgar Lee Masters, Robert Frost y Carl Sandburg— comenzó a escribir sus poemas en un lenguaje más cercano al inglés de esos poetas académicos que seguía. Aquí traduzco uno de sus poemas más famosos:

 

“To a certain lady, in her garden” apareció en la antología de Countee Cullen Caroling Dusk (Harper & Brothers, 1927). En Etnografía poética de Sterling Brown: una ontología del negro y el blues, publicado en Callaloo, vol. 21, núm. 4 (otoño de 1998).

La poesía de Brown estuvo influenciada por el jazz, el blues, las canciones sobre el trabajo y las piezas espirituales. Al igual que Langston Hughes, Jean Toomer, Countee Cullen y otros poetas negros de la época, sus escritos expresan preocupaciones sobre la raza en Estados Unidos. Southern Road fue bien recibida por la crítica y Brown pasó a formar parte de la tradición artística del Renacimiento de Harlem. Pero, con la llegada de la Gran Depresión, Brown no pudo encontrar editor para su segundo libro de versos. Se dedicó a escribir ensayos y se centró en su carrera como profesor en Howard, donde enseñó hasta su jubilación en 1969. Finalmente publicó su segundo libro de poesía, The Last Ride of Wild Bill, and Eleven Narrative Poems (Broadside Press) en 1975, seguido de The Collected Poems of Sterling A. Brown, editado por Michael S. Harper (Harper & Row, 1980). Brown es conocido por sus retratos francos y nada sentimentales de los negros y sus experiencias, así como por la incorporación del folclore afroamericano y el lenguaje contemporáneo en sus versos.

Beverly Lanier Skinner, ex profesora asociada de inglés en la Universidad de Millersville, escribe sobre Brown: Sus poemas escritos en ‘inglés literario y forma’ son traducciones al inglés estándar de la misma ontología del negro y el blues que [sus] poemas vernáculos y folclóricos expresan en código. El poema en inglés estándar, “A cierta señora, en su jardín”, traduce en broma, sin tener en cuenta los desafiantes imperativos de supervivencia de los afroamericanos, cómo los negros han vivido momentos tranquilos de sus vidas con alegría de vivir. El poema muestra a aquellos lectores no iniciados en la experiencia vivida por los afroamericanos el triunfo de las alegrías y los placeres simples con total desprecio por una presencia hegemónica. Este poema es una afirmación de belleza y humanidad que desafía las generalizaciones o estereotipos apresurados.

 

A CIERTA SEÑORA, EN SU JARDÍN

Traducción: J.S.B.

Señora, señora mía, ven adentro del jardín,
con dedos embarrados, el delantal sucio, que yo
a mi tiempo, aprenderé también el silencio de Arden,
un recurso escaso en mis versos por ahora.

¿Qué sería más propicio a tu tarea primaveral?
Aquí, casi cercado por tus vides y tus flores,
Seguramente no hay más gracia que pedir,
Ni mejor claustro para las horas difíciles.

Un paso más allá, comienzan las calles raídas
Con toda su farsa y su tragedia sin sentido—
Pero aquí, sin que importe ese escándalo inútil,
Haces crecer tus flores, sabiamente, por cierto

Tú y tu jardín significan lo mismo para mí,
La extraña sensación de un placer momentáneo,
La hurtada belleza —fragmentariamente, quizás,
¿pero, quién puede presumir la posesión de otro?

Oh, de alguna manera has robado, no sé cómo,
La secreta gracia de aquéllos a quienes
Has servido por tanto tiempo. Y, desvergonzada,
Ahora ostentas las ganancias de tus hurtos.

Por consiguiente, clamo en tu contra, aprovechadora…
¿Por atardeceres púrpuras dedicados a tan gratificante labor,
Deberías haber ganado tan fácilmente el deseado y
Caprichoso fruto de la tierra egoísta?

Una vida colorida en un mundo que deviene opaco,
La callada suficiencia en los días enclenques,
La frágil felicidad, la más hermosa
Por iluminar caminos sucios y sombríos—

Con seguridad recordaré todo esto,
Tu viejo y áspero vestido, manchado de barro,
Tu rostro embadurnado irradiando felicidad,
El enigma resuelto. Quizá, en turno, también puedas.

Sólo una vez, mientras recortas arbustos y cuidas las viñas,
(Haciendo tu valiente y ladina mueca de los días viles,)
Sonríe levemente ante estas honestas, nimias palabras—
Y eso será suficiente elogio para mis versos.

 

TO A CERTAIN LADY, IN HER GARDEN

Sterling A. Brown.

Lady, my lady, come from out the garden,
Clayfingered, dirtysmocked, and in my time
I too shall learn the quietness of Arden,
Knowledge so long a stranger to my rhyme.

What were more fitting than your springtime task?
Here, close engirdled by your vines and flowers
Surely there is no other grace to ask,
No better cloister from the bickering hours.

A step beyond, the dingy streets begin
With all their farce, and silly tragedy—
But here, unmindful of the futile din
You grow your flowers, far wiser certainly,

You and your garden sum the same to me,
A sense of strange and momentary pleasure,
And beauty snatched—oh, fragmentarily
Perhaps, yet who can boast of other seizure?

Oh, you have somehow robbed, I know not how
The secret of the loveliness of these
Whom you have served so long. Oh, shameless, now
You flaunt the winnings of your thieveries.

Thus, I exclaim against you, profiteer. . . .
For purpled evenings spent in pleasing toil,
Should you have gained so easily the dear
Capricious largesse of the miser soil?

Colorful living in a world grown dull,
Quiet sufficiency in weakling days,
Delicate happiness, more beautiful
For lighting up belittered, grimy ways—

Surely I think I shall remember this,
You in your old, rough dress, bedaubed with clay,
Your smudgy face parading happiness,
Life’s puzzle solved. Perhaps, in turn, you may.

One time, while clipping bushes, tending vines,
(Making your brave, sly mock at dastard days,)
Laugh gently at these trivial, truthful lines—
And that will be sufficient for my praise.

 

SOBRE EL AUTOR

Sterling Allen Brown (Washington, D.C., el 1 de mayo de 1901 – 13 de enero de 1989 en Takoma Park, Maryland). Se educó en Dunbar High School, se licenció en Williams College y fue elegido miembro de Phi Beta Kappa. Estudió la obra de T. S. Eliot, pero estaba más interesado en las obras de Amy Lowell, Edgar Lee Masters, Robert Frost y Carl Sandburg. En 1923, obtuvo una maestría en la Universidad de Harvard y trabajó como profesor en el Seminario y Colegio de Virginia en Lynchburg hasta 1926. Tres años más tarde, Brown comenzó a enseñar en la Universidad de Howard y, en 1932, publicó su primera colección de poesía, Southern Road. (Harcourt, Brace). Luego, Brown publicó dos estudios críticos, The Negro in American Fiction y Negro Poetry and Drama, ambos publicados por Associates in Negro Folk Education en 1937. Luego editó The Negro Caravan (The Citadel Press, 1941), una antología que abarca casi doscientos años de la poesía afroamericana. Brown murió el 13 de enero de 1989 en Takoma Park, Maryland.


BROWN, STERLING ALLEN. “To a certain lady, in her garden”, publicado en Poets.org. Disponible en https://poets.org/poem/certain-lady-her-garden [último acceso: 12/02/2024]

 

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